El elegante astro está perdiendo sus iconos anillos y lo está haciendo a una velocidad precipitada. Los datos se obtiene desde que las naves Voyager 1 y 2, los dos únicos ingenios hechos por el ser humano que han salido del sistema solar. De esta forma, afirman que los auténticos anillos desaparecerán dentro de unos 100 millones de años arrastrados por la gravedad del planeta como una lluvia polvorienta de agua y hielo.
Los auténticos anillos contiene una gran porción de agua, capaz de llenar una piscina olímpica en tan solo media hora. Solo con esto el sistema de anillos desaparecerá por completo en 300 millones de años. Resulta que las partículas y fragmentos que se precipitan en el ecuador de Saturno es aún mayor, según datos de la sonda Cassini. Por ende se cree en efecto que a los anillos les queda menos de 100 millones de años. Aunque parezca mucho tiempo, en realidad es un plazo relativamente diminuto si se tiene en cuenta que el planeta tiene una edad de 4000 millones de años aproximadamente.
Los anillos de Saturno en su mayoría son trozos de hielo que varían en tamaño desde granos microscópicos hasta pedazos con un tamaño de una casa modesta. Las partículas quedan atrapadas en un acto de equilibrio entre la atracción de la gravedad del gigante gaseoso y su velocidad orbital, que quiere lanzarlas hacia el espacio.