Movámonos a fuentes de energía renovables

Tras el paso del huracán María se confirmó algo que conocíamos, el pobre mantenimiento que tenía nuestro sistema eléctrico. Transcurrieron meses de desesperación entre los puertorriqueños porque el huracán devastó esa infraestructura. Finalmente, tardó 9 meses en restablecerse. No obstante, los apagones continúan siendo la orden del día en el país.

Tras el reclamo mayoritario del pueblo, el gobernador anunció la privatización de la Autoridad de Energía Eléctrica. Posteriormente, grandes compañías han mostrado interés en participar del proceso. Sin embargo, me llama la atención la propuesta de un supuesto grupo de puertorriqueños respaldados por grandes empresas para que nos movamos a energía nuclear llamado The Nuclear Alternative Project. Estos hicieron dos cumbres en San Sebastián y Mayagüez para presentar su proyecto. Sin embargo, trae más dudas que alternativas a nuestro problema energético.

Es una realidad que la energía nuclear podría traer un gran alivio en el costo de la energía. También, tiene una ventaja contra el sistema eléctrico actual que necesita del petróleo para funcionar porque es de las más limpias. Sin embargo, la vulnerabilidad que tiene Puerto Rico por el simple hecho de ser una isla, hace que pueda no ser viable este proyecto. Somos vulnerables a amenazas naturales como terremotos y ciclones tropicales que pueden provocar una emergencia nuclear y que se tenga que llevar un gran operativo de desalojo a nada más y nada menos que 3 millones de personas.

La renovación del sistema de energía eléctrica en Puerto Rico debe ser prioritario porque nos afectará a nosotros y a las futuras generaciones. Debe contemplarse exclusivamente transicionar a fuentes de energía renovables como la energía solar, Puerto Rico esta geográficamente en la zona perfecta para ello. Es energía limpia y sin riesgos que puedan poner en peligro el medioambiente y las personas.

Nota: Esta columna la escribí a fines del mes de noviembre del 2018 pero nunca la publiqué en este medio. Sin embargo, hoy el tema cobró notoriedad otra vez. Por lo tanto, decidí publicarla tal y como la escribí, sin editar.