Los incendios se pueden originar sí y solo sí tienen existen estos tres requisitos al mismo tiempo: calor, oxígeno y combustible. Si tan solo falta uno de esos requisitos, no se pueden producir incendios. Es por eso que existe el término denominado triángulo del incendio, es decir, tienen que existir esos tres requisitos para que pueda ocurrir un incendio.
Sin embargo, y por más ilógico que parezca, según la Administración de Incendios de los Estados Unidos, durante el invierno ocurren más incendios que en cualquier otra época del año, en los Estados Unidos. Entonces, ¿por qué ocurren incendios cuando hay temperaturas extremadamente bajas?
Aquí es donde entra en juego la observación. Durante el invierno, específicamente donde ocurren las temperaturas por debajo del punto de congelación (32°F o menos) no ocurren incendios forestales o son muy raros ya que el combustible (árboles y pastizales) está muy frío o congelado lo cual imposibilita la formación del incendio. Para que ocurra un incendio a bajas temperaturas, entonces, debe haber combustible caliente. ¿Dónde podemos encontrar eso? Si pensaste que era en las casas y en los autos, acertaste.
Durante épocas donde las temperaturas bajan demasiado, como en estos días a través de el norte y noreste de Estados Unidos, la gente depende mucho de los llamados calentadores o “heaters” para mantener una temperatura agradable en los hogares y autos. El problema es cuando se sobrecarga el uso de los “heaters”. Más aún, si hay objetos susceptibles a incendios como papeles, cartones o muebles cerca del calentador, fácilmente se puede iniciar un incendio el cual puede acabar consumiendo todo el hogar. Sin embargo, es la cocina el líder de causantes de incendios en el hogar. Durante el invierno, más personas cocinan dentro del hogar lo que incrementa el riesgo de incendios.
Lo mismo sucede con los autos. El rendimiento de la batería de los autos se disminuye en más de un 50% cuando las temperaturas están por debajo del punto de congelación. Como resultado, los cables del auto pueden comenzar a sobrecalentarse y con la gasolina y aceite como combustibles principales del auto, es posible que un auto se incendie. Esto es especialmente cierto en los autos viejos.
Una vez que el incendio de estos dos tipos (calentadores o autos) se inicia, el mismo crea su propio entorno caliente, y no se apagará hasta que el combustible se agote o sea enfriado por los bomberos echándole agua o quitando el oxigeno con un extintor de incendios.
Por estas razones es que ocurren más incendios durante el invierno que en cualquier otra época, pero como ya vimos, no son incendios naturalmente producidos si no que más bien son incendios de alguna u otra forma inducido por nosotros mismos.